no confundir las cosas.

En un artículo de opinión que firmo en Tribuna Latina ( El Debat.cat, inmigración) hago referencia a las últimas ocurrencias que vierte el futuro presidente de la cámara de diputados de Gerona el señor alcalde de Salt, Jaume Torramadé, critico las mismas.

En lo que va de la mañana algunos valientes anónimos me han enviado correos haciendo alusión a que se acabó la luna de miel con el señor Albert Piñeira, alcalde de la villa.

No confundamos las cosas, los que meten la pata y más son el propio gobierno, quien, insisto, avala con su "comprensión" las barbaridades que propone Torramadé, entre ellas, la limitación. del número de inmigrantes por localidad, incitando entonces a violar la constitución en su artículo Nº 139.

Luego continúa con su delirio, ya que propone además, que no se le alquile ni se le vendan pisos a los inmigrantes dentro del centro de Salt, empujando a crear guetos, vaya, es sin duda un genio este Torramadé.

Se queda a gusto dando rienda suelta a su xenofobia, esa es MI opinión y así lo expreso en este enlace: 
http://www.tribunalatina.com/es/notices/con_la_aprobacion_de_mas_la_dignidad_de_los_inmigrantes_no_vale_nada_31900.php.

Pero todo esto no tiene NADA que ver con el actual gobierno de Puigcerdà, el señor Piñeira no es ni puede ser responsable de una política errática en materia de inmigración por parte del gobierno de la Generalitat.

Ni luna de miel ni similar, el señor Piñeira y mi persona tienen una relación cordial de vecinos, por que creo que ambos somos adultos y tenemos la suficiente madurez como para saber separar la gestión municipal de la del gobierno.

No confundamos las cosas, ni tenemos un preacuerdo electoral ni vamos a meter presión como entidad por que, sencillamente, en Puigcerdà no existen problemas de convivencia.

Expreso mi opinión de la gestión a nivel del Gobern y su gestión en materia de inmigración y no tengo por qué esconder lo que pienso y en este caso creo que las propuestas del alcalde de Salt son irresponsables, fuera de lugar, segregadoras, de tinte xenófogo y por si fuese poco, intentan violar la constitución con el valor agregado ( como si no bastase) de contradecir la ley de extranjería que ¡¡¡¡¡¡ellos mismos votaron !!!!!.

Estoy seguro, segurísimo de que el señor Piñeira no comparte la postura de Torramadé.

Y no hay una luna de miel, lo que sí hay es una sintonía en su accionar, una coincidencia en su estilo (aún es muy pronto para una evaluación) de hacer las cosas, pero eso es lo que hay, nada más, me considero libre de decir lo que pienso, más cuando veo que intentan pisotear la dignidad de los inmigrantes.

Que quede claro: defendí, defiendo y defenderé siempre los derechos de los inmigrantes y más si se pretende borrar con el codo lo que antes han escrito con la mano.

Y no vengamos con que aquí no aportamos nada o que se gasta mucho en nuestro colectivo, vean el informe de La Caixa, luego hablen, alrededor de nuestro colectivo se han dicho y se dicen muchas mentiras.

Que no pretendan ahora culparnos de todos los males, que no nos usen de chivo expiatorio, que sepan mirar las consecuencias que tuvo la "brillante" sugerencia del alcalde de Vic, en su momento, cuando se pretendió negar el empadronamiento a los inmigrantes, Anglada y su PxC, que gracias a que los otros políticos alentaron la xenofobia su formación ahora cuenta con 67 concejales en el territorio catalán y ahora hasta piensan en un partido a nivel nacional.

Seguramente pueda surgir alguna discrepancia puntual con Piñeira y sin duda quedará salvada a través del diálogo, por esa es la diferencia: con Piñeira se puede hablar.

 Por eso, no confundamos las cosas.     Piñeira es un vecino y alcalde de Puigcerdà, Torramadé es un alcalde de Salt, diputado y presidente de la cámara de diputados de Gerona, lo cual hace que sus propuestas no puedan ser tomadas a la ligera, sino vistas como un tremendo acto de irresponsabilidad.

Así de claro.    Peras no son manzanas.