R.cat se presentó aspirando a gobernar Puigcerdà apelando a una gestión llevada a cabo por un médico que también llegó a ser un Conseller efímero y que ya en esa campaña electoral era un cadaver político, vamos un zombie que lo que sí supo consevar fue su altanería y su ego súper desarrollado.
Bien, el señor Toni Veres en sus declaraciones a medios de comunicación de entrada, en su momento intentó "embarrar" o enrarecer el ambiente, desviar la atención llegando a acusar que quien suscribe habia sido contratado para hacer la guerra sucia durante las muncipales,
En aquellos días R.cat, encabezado por Veres y con el respaldo del zombie ( si se siente molesto ya sabe por dónde puede pasar a quejarse Don zombie) llevó adelante una campaña pobre de argumentos y de ideas al igual que de programas. Al punto que se dió el lujo ( ¿ o habrá sido un acuerdo con sus socios políticos?) de no hacer campaña el domingo previo a las elecciones.
Bien, desde ya hace unos 10 días me comentan que Toni Veres no hablará con este servidor, algo que era de esperar, no todos saben ser ni estar dentro del mundo de la política, hay que tener espaldas anchas, nivel medio de tolerancia, saber escuchar pero también tener la hidalguía de aceptar que somos humanos y nos podemos equivocar, tal y cual lo hizo Vere con R.cat. -
Quizás al señor Vere le haría falta un poco de auto crítica, pero también de una reflexión pública, por respeto a las personas que le votaron.
Toni Veres lleva pocos meses como concejal pero ni se lo ve, ni se le escucha ni nada similar, aunque supongo que irá a los plenos por que a fin de cuentas allí sí que cobra unas monedas por asistir.
Pues permítame señor Veres que le recomiende algo que suelo aplicar en mi vida desde siempre y créame. me va muy pero muy bien para dormir tranquilo.
En su lugar yo no dudaría en dimitir de mi cargo, primero y fundamental por amor propio, por dignidad, segundo por respeto a los vecinos que lo votaron y tercero para poder librarse de una mochila que le endiñaron en el justo momento que usted aceptó para ser candidato.
Yo dimitiría pero con la cabeza bien en alto y lo haría hablando alto y claro, dando esas razones que ya de por sí conocemos casi todos, porque, señor Vere, esta localidad es muy pequeña y no sólo las paredes tienen oídos.
Es Vox Pópuli el está usted completamente decepcionado, que se siente engañado por sus compañeros y por el ¿líder? de R.cat, y no por lo que comentan compañeros de partido, como por ejemplo que una de sus decepciones es la alianza con los convergentes a nivel catalán.
Créame que esto de poner la cara o el pecho a las balas no es tan malo como parece, entre otras cosas se gana respeto, algunos enemigos, es verdad, pero, lo mejor de decir las cosas por su nombre, de hablar sin pelos en la lengua conlleva el visualizar quienes son sus amigos de verdad y quien puede estar a su lado para usarlo.
Ahora mismo es usted el regidor fantasma, el que es sólo nominal, el que ni hace oposición constructiva ni de la otra, es usted hoy por hoy objeto de comentarios a nivel local, algunos lo bautizaron ya el pasado año como el invisible. Es señor Veres, el mejor socio que puede tener Albert Piñeira por que usted sencillamente no propone, ni pregunta ni defiende ni cuestiona, vamos, señor Vere, que es usted dentro del ayuntamiento y para el pueblo una figura ornamental.
Para muchos dentro de los que me incluyo, es usted el regidor sin regiduría, el mudo como le digo yo, ya ve, esa es la imagen que no sólo para mí sino para vecinos y sus propios compañeros es usted eso, por eso sería bueno que hablara alto y claro, que diga lo que ya se sabe, que sepa todo el mundo porqué Toni Veres ni se ve, ni se escucha ni se le tiene en cuenta, ni siquiera se sabe si está o no está por que es secillamente inexistente.
Ya le digo, por amor propio, por dignidad y por sentido común yo les paso el testigo a los que todavía creen en el zombie, si es que alguno cree aún y sino, pues. entrego el acta de concejal y punto.
Así al menos más de uno lo mirará con respeto y no como hasta ahora, que lo hacen por encima del hombro y riendose a sus espaldas. No siga siendo el nº 12 señor Veres, ponga un poco de cosas de varón y pegue ese puñetazo encima de la mesa, vomite todo eso que quiere decir y luego lo verá, se sentirá tan pero tan bien que hasta me invita a un pinxo-pote.
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