12 años donde un gobierno que pudo hacerlo todo y más, con
mayorías absolutas y sin pactos para gobernar, 12 años donde los vecinos de
Puigcerdá hemos contemplado cómo nuestra villa se fue deteriorando día a día.
Y lo peor fue que se tomó como un proceso natural, hoy una
cosa rota…que al otro día fueron 2…3…y así hasta llegar al estado lamentable
que hoy se contempla en el 90% de la villa.
Con un sinnúmero de promesas no sólo incumplidas, sino que algunas
de ellas reiteradas campañas a campaña.
Y este último año ya directamente de espaldas a sus vecinos.
Estos últimos 4 años se puede decir que Puigcerdà es
literalmente un pueblo sin ley ni orden ni seguridad, ni respeto a sus vecinos.
Puigcerdà en estos últimos años se ha convertido en una localidad
donde cada uno hace lo que quiere sin que nadie ponga ni freno ni cuidado.
Desde una verdadera invasión de terrazas que erradican casi
de cuajo los sitios donde sentarse a un deterioro que avanza a pasos agigantados,
donde se pretende esconder o maquillar la dejadez, la mugre, el abandono y la
decadencia sólo en ciertas partes del pueblo.
Sólo se ha medio mantenido la zona vial más transitada o
mimado algún barrio en concreto mientras que en otros, meses sin luz en sus
inmediaciones.
La imagen que tenemos en el ascensor vertical a sólo metros
del ayuntamiento es LAMENTABLE. Y lo
mismo en el inclinado.
La falta de contenedores de basura, la ausencia casi total
de papeleras, ahora cubiertas parcialmente sólo por donde pasan los turistas.
La ausencia de la Policía Local por las noches, debido a la
falta de personal, que ahora pretende cubrir con 3 nuevos puestos, cuando serían
un mínimo de 6 y una reestructuración interna considerable…de pena
Una residencia mal gestionada donde los que sufren las consecuencias
son los abuelos.
3 años los abuelos en la calle…a causa de un gobierno sin
ideas, ni previsión, ni ganas, ni implicación ni compromiso, ni una pizca de
empatía.
La compra de un casino que el pueblo ya disponía y que se
infrautiliza.
El deterioro absoluto de los 2 parkings municipales, que son
utilizados como garajes particulares de esos vecinos que el alcalde mima a
cambio de votos.
Y una renuncia de la que hablaremos en otro escrito, porque
tiene mucha tela por cortar.
Se va en 6 meses el peor alcalde de la historia de
Puigcerdà, el más votado pero el que menos hizo por la villa. Tiró de las obras de su antecesor los
primeros 4 años, luego hizo una plaza que hacerla significó la obra más larga
de la historia de Puigcerdá y una oficina de Policía.
Nada más. Una
gestión para olvidar. Promesas
incumplidas. Planes y obras que nunca
se hicieron pero que sirvieron para titulares de diarios y medios serviles,
pero que fueron y son humo, HUMO, IMPROVISACIÓN, REVANCHISMO las banderas de un
gobierno oscuro, ineficiente, gris.
Una cosa que sí fue eficaz:
AUMENTAR EN 130 POR CIENTO EL GASTO DEL EQUIPO DE GOBIERNO.
Sin embargo, uno de los aspirantes a ocupar su puesto le agradece
el ¿trabajo hecho?
Dios nos pille confesados, porque de ganar ese aspirante nos
espera más de lo mismo y peor.
En los próximos escritos iremos desgajando paso a paso las promesas no cumplidas, salpicadas además por las consecuencias bien a la vista de lo que ha sido y sigue siendo el peor gobierno municipal de esta localidad.
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