Y Ramón Serra se fué.
El PSC le reclama que abandone su concejalía, cuando en realidad lo que tendría que hacer el PSC cerdano es darse un baño de realidad, sobre todo en la villa.
La actual dirección del PSC Puigcerdà es como un árbol seco, queda el tronco, pero nada más, sin ideas, sin propuestas, sin iniciativas, se han quedado en el pasado, han ido perdiendo paulatinamente apoyos y militancia y no han hecho nada para recuperarlo.
Puede que la marcha de Serra los traiga al presente, que los lleve a reflexionar y quitarles el polvo a las banderas del partido que junto a los principios e ideales del PS se han quedado en un rincón olvidadas.
Se merece el PSC perder aún más dirigentes, dada la actitud pasiva que ha mantenido en estos últimos tiempos a nivel de la villa, ya me gustaría oir a Maurell y saber que piensa de esta marcha.
Serra ha marcado el camino, quizás sea uno de los muchos que se marchen, se mojó y eso es más que destacable, algunos otros "encumbrados" dirigentes de otros partidos también tendrían que hacerlo y no seguir en la ambiguedad que hoy mantienen.
Pero es lo que tiene el poder, que al igual que alguna droga, envicia y para dar el portazo como Serra hace falta ser además de buena persona, tener coraje, principios firmes y las cosas claras, en Reagrupament de momento no se visualiza reparto de poder y eso, a algunos no les gusta.
Serra se encuentra en el ocaso de su vida política y eso no deja de ser una ventaja.
Al PSC Puigcerdà le queda grande la villa y los valores y principios que dicho partido representa, les falta capacidad, les falta gente con poder de convocatoria, gente que levante esas banderas olvidadas y sobre todo, les faltan dirigentes que no solo se mojen, sino que sean capaces de ofrecer un programa de gobierno como Dios manda.
La actual dirección del PSC Puigcerdà necesita un cambio, generacional sobre todo, pero un cambio desde sus bases mismas, le falta democracia interna y le falta abrirse a los vecinos, se han quedado en el pasado y sin motivación interna, sin guías o personas que de verdad quieran y aspiren no solo a ver una villa para todos y no para unos pocos sino una comarca que de una buena vez por todas se ponga las pilas y sea capaz de lograr e impulsar cambios profundos y necesarios.
Pero el PSC no lo veía o los responsables del partido tuvieron que que ver cómo se llega a este punto para reaccionar y lo hacen pidiendole el cargo a Serra cuando lo que tendrían que hacer es pedirle a todos los simpatizantes y militantes del partido disculpas por esta analepsia profunda en la que a lo largo de varios años han estado y siguen estando sumidos.
Cambios como los protagonizados por Serra son necesarios para que más de uno se de cuenta que el pedestal que está subido es de barro y que se desmorona con facilidad, a ver si luego de esto se producen las reacciones correctas,necesarias e imprescindibles para reflotar un PSC que está en el fondo del armario hoy por hoy.
Muy bien don Ramón, eso es tener coraje y algo más.
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