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Carmen Villar Perearnau, tenga usted la amabilidad de leer.



Por motivos de salud no pude como hubiese querido, continuar en su día con lo que vendría a ser la segunda parte de la caja de truenos abierta por Albert Martínez de Alp, en este caso la contestación en el diario El Periódico, la señora Carmen Villar Perearnua, fue como mínimo, bajo la desinformación que evidentemente tiene y la visión más que equivocada acerca de la principal fuente de ingresos que tienen o tenemos los que vivimos en la Cerdanya.

A eso se debe de sumar un tono que raya lo despectivo, pues al leerla deja toda la sensación de que se siente por encima de los que aquí vivimos, este blog no precisamente un sitio que se caracterice por ser diplomático, ni andarse con rodeos, mejor directo, palabras que las podamos entender tanto los señores con estudios universitarios, carrera y cartera llena de la misma forma que lo puede entender un vecino de la comarca que por cierto, puede que algún vecino le falte conocer de arte, música o idiomas, sí, pero lo compensa su humildad, solidaridad, ubicación y experiencia de vida.

La señora Villar, conste que desde mi punto de vista, está equivocada al afirmar que los barceloneses son la principal fuente de ingresos que tiene la Cerdanya, ella misma se autodenomina y engloba incluso al resto como los veraneantes de Barcelona, permítame señora que la corrija, pues se equivoca usted en esta apreciación, le puedo aceptar que tenga sus propias deducciones en lo que usted percibe y da por sentado, como es ese caso de una animadversión hacia los barceloneses o familias con segunda residencia en la Cerdanya.

Me tomo el atrevimiento, señora Villar de pensar que cuenta usted con una buena base de estudios y es posible que tenga además una posición económica holgada, digo esto en base a la forma de dirigirse a los vecinos de esta comarca, por tanto, este servidor que lo más posible no cuente con su nivel académico, repito se tomará el atrevimiento de discrepar con sus afirmaciones, en especial con esa que mal nos duela ustedes, los barceloneses son nuestra principal fuente de ingresos.

Mire usted, para comenzar, sus habituales fechas en las que suelen disfrutar de esta comarca son hoy por hoy los dias del mes de agosto y de los cuales la afluencia REAL se concentra en los últimos 15 días de ese mes, no antes y es un hecho totalmente contrastable.

Continuemos, el segundo incremento importante de vecinos de segunda residencia se concentra en 11 días que van desde San Esteban ( 26 de diciembre) al 4 de enero ( el 5 se ha marchado el 95%  a la cabalgata de reyes sea de Barcelona o periferia), Semana Santa, que actualmente se concentra sólo de jueves a domingo ( lunes de mona también lo festejan en Barcelona en un 98%)  y luego ya depende del calendario y cómo se den los famosos "puentes" que es cuando nuevamente se producen aglomeraciones considerables.

El resto del año, señora Villar, a no ser los meses invernales donde, dependiendo de la nieve, pero seamos optimistas, pongamos de diciembre a abril, que serían 5 meses, o sea que con suerte serían 75 días al año ( 50 días arrojan las estadísticas, le estoy dando un 50%  más)  es lo que nos estarían visitando los barceloneses señora Villar.

Dando por descontado que su formación le permite hacer un cálculo rápido es que me permito corregirla, no se vive holgadamente trabajando o facturando con los barceloneses 75 días al año, de ser así los que aquí vivimos seríamos tema de estudio, a nivel comercial me refiero, seríamos un fenómeno y una referencia, porque, fíjese usted,  si ustedes son nuestra principal fuente de ingresos y sólo nos visitan 50 días al año es que el modelo de negocio es sencillamente genial.

Imagine, señora Carmen Villar, si fuera como usted dice, en lo referente a la atención, pues usted afirma además que la mayoría de los comerciantes de la zona son: maleducados y nada amables, imagine entonces si se tratara bien al segundo residente, entonces ya andaríamos en Ferraris y nuestras vacaciones serían todas en el extranjero.

Creo, estimada señora que sus afirmaciones, además de desafortunadas tienen que ver con el desconocimiento de la comarca que visita, claro que si usted al igual que la mayoría de los actuales vecinos de segunda residencia hacen sus compras en el súper y por comodidad ( no por una economía menguada como el resto de los mortales) ya no va tanto a los restaurantes porque ya no da tanto caché ni tampoco hace falta que se les vea tanto haciendo vida social, sino que comen en sus casas. como es natural, porque no es que no tengan para gastar como  antes sino que según usted les tratamos mal, créame que es fácil asegurar lo que usted asegura, porque, por fortuna la realidad es muy diferente de la que usted describe.

Para finalizar, si desea comprobar lo que le digo, o sea, que los comerciantes,  donde sí existen bordes y maleducados como en todos lados, puedo ofrecerle un tour por muchos y variados comercios de la Cerdanya, donde la atenderán como una vecina más, incluso en muchos de ellos, aunque pase meses sin venir recordarán su nombre y puede que hasta sus gustos.

Creo, señora mía. que ni tanto ni tan poco, el señor Martínez cometió el error de señalar a todos los barceloneses como incívicos, cuando por suerte es sólo una ínfima minoría, algo que usted también hizo en su escrito, pero el señor Martínez al menos se disculpó, en cambio usted, con su educación, su buen nombre, su segunda residencia o su estatus social no lo hizo, por tanto, permítame decirle señora, que este vecino sí se expresó y luego rectificó puntualmente, pero usted no, todo lo contrario.

Entonces ¿ quién es aquí el que falta el respeto y se posiciona por encima de los demás? Por que su escrito deja toda la sensación al leerla que es usted de esas  personas que sólo están acostumbradas a mandar, a que le sirvan y  de ser una persona autoritaria que no acepta otra opinión que la suya.

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