Los cambios necesarios en Puigcerdà se acumulan

Cada verano asistimos más o menos al mismo escenario en la comarca.

Largas colas para entrar en Puigcerdà (los de Barcelona tienen predilección de coincidir con los horarios de aquellos que acaban su jornada laboral o la hora que tienen su comida), gente que aparca donde se le sale de las narices sin recibir ni sanción ni nada que se le parezca.

                    Resultado de imagen de sin ideas


Destrozo del mobiliario urbano, invasión indiscriminada de terrazas que además muchas no respetan los horarios ( la plaza de los Heróis es una muestra patente, no les alcanza con las "peceras" sino que además se agregan más y más mesas) y por supuesto;  derroche injustificable en conciertos y actuaciones que se "pisan"  incluso en la misma villa.

Un dudoso, cuestionable y criticado permiso ( que se extiende más allá de setiembre) a un pub o discoteca al aire libre, con contaminación lumínica excesiva e invasiva ya que molesta a vecinos a centenares de metros de la misma, ya de los decibelios mejor ni hablamos.

Dentro del tema tránsito, sobre la plaza Barcelona es ya para mirarlo con humor, porque lo que sobra en la carretera nacional, a la altura del cuartel de la Guardia Civil, falta donde hace falta para una regulación del tráfico. 

Resulta que en la carretera nacional les complicamos irracionalmente la circulación a la gente y "arriba", en la plaza Barcelona propiciamos un caos que se perpetúa con los años.

Un semáforo a la altura del cuartel de la guardia civil no se justifica, a no ser para entorpecer el tráfico y crear más caos del que se produce en Agosto. 

Pero...una batería de 3 semáforos coordinados en la Plaza Barcelona agilizarían el tránsito de forma notable,  porque los pasos de peatones a través de las "cebras" provocan un atasco considerable en casi todas las direcciones, un río de gente utiliza los pasos de forma contínua e intermitente, lo cual provoca una interrupción innecesaria. 

Claro... hay que gastar, sin duda, pero vamos, que mejor gastar en grupos u orquestas que nos salen un ojo de la cara bajo la excusa que atraemos turistas, que por cierto, siempre beneficiamos a los mismos, plaza de Santa María ( que se llena sin necesidad de traer nada extra) y ya en mucho menor medida a plaza Cabrinetty, una de las plazas o zonas de la villa donde su entorno comercial que debería potenciarse más.

Se necesitan cambios en Puigcerdá, los carteles no venden, tampoco venden las cataratas de actividades para atraer a los turistas, sobre todo los conciertos, que sí, benefician a 3 que se hartan de vender alcohol, pero es evidente que los comercios de la zona no venden más, por algo se quejan de una temporada floja.

Los cambios de estrategia para atraer turistas que gasten más allá de 2 claritas y una botella de agua en las terrazas se hacen ya no necesarios, se hacen imprescindibles.

Pero esos cambios sólo se pueden producir si existe una comunicación con el comercio de la villa, no sólo con los afiliados a la asociación que son notablemente menos que los que no están afiliados.

La figura de un dinamizador comercial, que cuente con experiencia, profesionalidad y responsabilidad es necesaria, pero nada de regalar nada, que se gane la nómina en base a resultados, porque de estudios y de presentaciones ya estamos más que servidos.

Hacen falta cambios, muchos y profundos.

Eso de hacer bonito las 4 calles del casco antiguo y por donde pasan los turistas es evidente que no da resultado,  la villa no es sólo el centro comercial, el deteriorio de muchas calles y la falta de matenimiento  de la misma es notable.

Aquello del "urbanismo de detalle" ni se nota, ni se ve ni se aplica, pero se le espera con impaciencia.

En relación a la falta de personal en la Policía Local es una falta que el equipo de gobierno no la cubre porque no quiere o porque le faltan ideas.

Pues bien, señores, a espabilar que las cosas se les fueron de las manos hace años ya.

Puigcerdà no es que se merezca más Policía Local, no.     TIENE  que tener por narices más personal y ustedes lo saben, a la hora de los colegios se necesitan al menos 3, sólo en los centros de estudios, por no decir 4.

Pero a esa hora comienza el reparto de mercancias en el casco antiguo, algo que se prolonga hasta al menos mediodía.     Bien, pero resulta que los espacios destinados a que aparquen esos vehículos están ocupados por particulares y nadie les sanciona, claro,, hay que aparcar frente mismo a donde trabajo, por ejemplo, inmobiliarias, a metros del paseo 10 de abril, o al costado de plaza Santa María, donde es imposible que aparque un repartidor.

¿Resultado?   aparcan sobre el paseo, aparcan en medio de la plaza o donde pueden y claro, luego sí que a ellos les llegan las multas, pero, curiosamente no se sanciona a los que ocupan las plazas de aparcamiento dedicadas a carga y descarga.

Madre mía si hacen falta cambios en Puigcerdá.

Necesito 4 escritos para mencionar sólo parte de ellos.

Por eso me despido formulando una pregunta, ya que hablamos de zonas de aparcamiento.

¿Alguien sabe porqué la calle Cerdanya, donde existen una decena de aparcamientos no es ni zona azul ni naranja? 

¿Porqué, en pleno casco antiguo, donde más se necesita que exista rotación que genere aparcamiento la calle Cerdanya no se toca?

¿ A quién beneficia que esa calle sea zona de libre aparcamiento, cuando es una calle que puede generar rotación más que necesaria en el centro mismo de la villa?

Pero no....mejor ponemos en funcionamiento de un semáforo inútil en la carretera nacional, que provoca retenciones innecesarias. 

Es más que evidente que necesitamos cambios, que los necesitamos ya, sobre todo teniendo en cuenta que tenemos más 55 mil euros en nóminas de 3 regidores que deberían estar demostrando que para algo les pagamos. 

Si este servidor propone ideas o soluciones ellos tienen la obligación de promover y efectuar los cambios, que para algo se les paga, no sólo para hacer el bonito para los turistas, que los vecinos también nos merecemos que se mire y se gobierne pensando en ellos.
















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