viernes, 15 de diciembre de 2023

No basta con fotos de postureo. Hace falta responsabilidad y compromiso real

 



No basta con fotos de postureo.  Hace falta responsabilidad y compromiso real

Cerdanya da señales obligadas por el tema reciclaje, señales, no un plan de actuación, ni pone objetivos inmediatos, cuando por delante solo se dispone de un año calendario para cumplir metas establecidas por la nueva normativa, que exige cumplir esas metas.

Puigcerdà está a años luz de cumplir, sobre todo teniendo en cuenta que ni siquiera está en estado embrionario el poner un plan de choque en materia ya no de reciclaje, sino del tema basura en su totalidad.

Hacerse fotos y decir que tienen un par de opciones que se están barajando es admitir que no tienen nada de nada encima de la mesa, incluso se reconoce que ni siquiera tienen idea clara de dónde comenzar ni cómo afrontar el problema.

La regidora de medio ambiente o el alcalde en la sombra pueden mentir como lo han hecho a los medios de forma absolutamente descarada, pero su mentira solo puede colar con aquellos que o no entienden del tema o sencillamente pasan del mismo.

Puigcerdá ostenta el triste título de ser el vagón de cola en materia de residuos y reciclaje y por si fuese poco, arrastra y perjudica al resto de los 16 municipios que componen el Consell Comarcal.

Resumiendo: el gobierno municipal de Puigcerdà lleva décadas sin hacer los deberes en materia de residuos y no hay ni plan ni ideas para corregir esta situación a mediano plazo, mucho menos a corto plazo.

Y los plazos se han agotado.   Puigcerdá miente soberanamente en el momento de afirmar que tiene “un par de propuestas” cuando es más que evidente que a pesar de hacer alarde de tener un plan de gobierno, donde el tema residuos tiene que ser una prioridad, la realidad nos demuestra es que ni el teniente alcalde, ni su regidora ni mucho menos el vecino al que llamamos alcalde, sabe qué hacer ni por dónde tirar.

La basura les estalló en la cara, sobre todo cuando el ex alcalde les deja un “regalito” de unos contenedores inadecuados y encima, como si fuese poco, que generan un gasto extra de centenares de miles de euros.

Gestionar los residuos no es tarea sencilla y más cuando dicha gestión no depende solo del gobierno municipal, la intención de la coalición es ir por libre en el tema…muy mala idea, sin duda alguna, una temeridad que como siempre acaba pagando el contribuyente.

Una foto está muy bien, pero lo que aquí se necesita resultados.   Y tanto Armengol, el alcalde en la sombra por dos años y quien manda de verdad en Puigcerdà, al igual que la regidora de medio ambiente saben muy bien que no tendrán resultados a corto plazo ni que vayan a Lourdes a pedir un milagro.

Es lo malo de no tener ni idea de qué hacer.  Y lo malo de saber que lo tienen no complicado, sino que MUY complicado en temas basuras.     Comenzando porque no está en sus manos el tema legal de la recogida de basuras, la justicia en España no va lenta, está paralizada y los recursos interpuestos por la empresa que actualmente recoge la basura puede tener congelados los intentos de agilizar o mejorar la recogida y reciclaje.    Que bueno sería que Armengol y cía dijesen al menos parte de la verdad.

¿Cómo se soluciona o se pone en marcha una solución a corto y mediano plazo?   Pues no es nada complicado, pero…la regidora cobra y bien que cobra para hacer ese trabajo…aunque ni lo hace ni tiene realmente idea de como hacerlo. 

Así que a esperar tranquilamente sentado en casa a contemplar como vuelven a mentir, a estrellarse y a seguir en la cola de los municipios que menos reciclan, lo peor de todo, seguir arrastrando a los otros 16 que componen las Cerdanya.    

El presidente del Consell seguro que desea salir de esta etiqueta, seguro que está comprometido, pero con tremenda mochila de contrapeso como es Puigcerdá, dudo que lleguen a conseguir ni la mitad del objetivo que exige el tratado. 



No hay comentarios: